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Aquí tienes la respuesta a tus dudas sobre la plusvalía municipal

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El Impuestos sobre el Incremento de Valor de los Terrenos de Naturaleza Urbana (IIVTNU), es un impuesto directo, de carácter municipal, que está gestionado por los ayuntamientos, y que se conoce popularmente como la plusvalía municipal. Está regulado por el RD 2/2004, de 5 de marzo, en el que se aprueba el texto refundido de la Ley Reguladora de las Haciendas Locales.

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¿Por qué se paga la plusvalía municipal? El IIVTNU establece que, con el paso del tiempo, la propiedad o el terreno ha experimentado un incremento en el valor del mismo, en el momento de su transmisión. Para determinar este incremento se utiliza el valor marcado por el Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI), que aportará el aumento del valor y con el que se calculará el importa a aportar.

Estamos hablando del usufructo, tanto temporal como vitalicio, y del derecho de uso y habitación. Dicho de otra manera, en cuanto hacemos algo que no sea “dejarlo morir o abandonar” la propiedad, habrá que pagar la plusvalía municipal, da igual si vendes, cedes o donas.

Este impuesto está gestionado única y exclusivamente por los consistorios locales.

¿Por qué se paga la plusvalía? El IIVTNU se cobra cuando existe una transmisión de la propiedad del terreno por cualquier título, entendido como la herencia o legado, la donación, transmisión, compraventa o permuta, así como la enajenación en subasta y la expropiación forzosa. También se activará al constituir o transmitir cualquier derecho real de goce, limitativo del dominio sobre dichos terrenos.

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¿Quién tiene que pagarlo? El sujeto pasivo varía dependiendo del tipo de operación que se realice. Encontramos dos tipos de sujeto pasivo:

1. Si se trata de una transmisión gratuita, como es el caso de las donaciones, tiene que pagar el impuesto el que adquiera la propiedad del inmueble o del terreno. Es decir que aquel que va a disfrutar del bien que recibe.
2. Cuando el dueño de la propiedad (ya sea un inmueble, o un terreno) gana dinero con la operación, es decir que recibe un beneficio, tendrá que pagar el que está transfiriendo el bien. En este caso el pago de la plusvalía municipal lo hace el vendedor.

Es decir que aquel que disfruta de la propiedad o que ha recibido un beneficio por la transmisión, es el que tiene que pagar dicho impuesto

El Tribunal Constitucional ha declarado inconstitucional los artículos 107.1, 107,2 a) y el artículo 110.4 de la Ley Reguladora de las Haciendas Locales, ya que considera vulnera el principio constitucional de la capacidad económica que recoge el artículo 31.1 CE. Puesto que no se vincula necesariamente la existencia de un incremento en el valor real del inmueble, sino a la simple titularidad de la propiedad durante un periodo de tiempo comprendido entre 1 año y 20 años. Por lo que se declara inconstitucional aquellas transmisiones que propiedades y/o terrenos urbanos cuando se registran perdidas. Esta sentencia del TC no afecta a las expropiaciones forzosas.

Si no hay beneficio en la transmisión de la propiedad, no hay que pagar la plusvalía municipal

La plusvalía municipal es una de las principales fuentes de ingresos de los ayuntamientos, pero con el aumento de las transmisiones por falta de capacidad económica para seguir pagando el inmueble, el Tribunal Constitucional se ha visto obligado a revisar la Ley y declarar que las transmisiones de las que no se reciban ganancias no deben de ser pagadas por el que realiza la transmisión, con lo que tumba dicha Ley.

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