Para acertar con la elección del seguro del hogar, es necesario saber exactamente qué cobertura estás contratando. Esto exige dedicarle un tiempo al estudio de las condiciones de la póliza y así evitar sorpresas después. Es fundamental saber qué daños se cubren.
¿Se asegura igual un piso de nueva construcción que una casa centenaria o de segunda mano? No, existe una diferenciación según sea su antigüedad y si se emplea como residencia habitual o no. Lo mismo sucede con el importe de la indemnización, que depende de cada aseguradora, y donde la media ronda los 400 euros. En función del daño algunos pagan menos y otros llegan a triplicar esta cantidad. El seguro de hogar es obligatorio en numerosos países como Francia o Suiza (donde se exige incluso en alquileres),mientras que en lugares como Reino Unido o España todavía no queda exigido por ley.
En nuestro país, Cáceres, Sevilla y Cádiz son las provincias con más índice de siniestralidad en el hogar mientras que Lleida, Soria y Huesca figuran entre las que menos. Nuestra capital, Madrid se encuentra a dos puntos por encima de la media nacional.
¿Cómo actuar ante un siniestro?
Desde la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) insisten en que si una vivienda tiene seguro, este debe ocuparse de todo.
Si somos los culpables del desperfecto, la empresa lo reparará en nuestra vivienda y en la del vecino afectado. Además, si el desperfecto nos lo ocasiona un vecino sin póliza, nuestro seguro lo cubrirá y luego intentará facturárselo al causante. En todo caso, hay aspectos muy concretos que debemos tener en cuenta a la hora de elegir tanto la compañía como el seguro:
- Lee todas las cláusulas y la letra pequeña del contrato, y pregunta todo aquello que no entiendas. Esto último es importante para evitar disgustos.
- Compara precios, coberturas, limitaciones y exclusiones entre las diferentes compañías. Si no te convence la oferta de una empresa o el agente de seguros no te infunde confianza, no te conformes y busca otra empresa o profesional que te proporcione más seguridad.
- Asegúrate de qué forma el seguro repondrá los objetos, y de qué proceso sigue la empresa aseguradora para responder ante eventuales siniestros o robos. Dependiendo de tu contrato, se reemplazará el objeto siniestrado bien con otro de igual o similar calidad o bien con dinero en efectivo. Toda esta información debe constar por escrito.
- Consulta el plazo marcado por la póliza para notificar posibles siniestros a la compañía, y cuál es la documentación que debes presentar si se produce una situación de este tipo.
- Infórmate, asimismo, de cuáles son las gestiones que debes llevar a cabo para cancelar la póliza. Es habitual que tengas que avisar varios meses antes por escrito para evitar el cobro de las mensualidades.
- Negocia con el agente de seguros las condiciones que no te satisfagan o no se ajusten a tus necesidades. Estas modificaciones también reflejarse por escrito, o no podrás reclamar si no se cumplen.
- Las comisiones, intereses e impuestos asociados a la póliza son otros aspectos a tener en cuenta, ya que pueden aumentar de forma significativa la cuota del seguro.
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