¿Es necesario inscribir el contrato del alquiler en el registro de la propiedad?

El alquiler de una vivienda se define como un acuerdo entre particulares que se plasma en un documento privado. Así lo establece la Ley de Arrendamientos Urbanos (LAU). Por eso, la normativa no obliga a inscribir el inmueble en el Registro de la Propiedad,  pero ¿Por qué te convendría hacerlo?

Ventajas de registrar el contrato de alquiler

Aunque la mayoría de contratos de alquiler no se inscribe en el Registro de la Propiedad, solo si lo está puedes tener protección jurídica. Para darlo de alta, es necesario que vayas a un notario para que certifique el documento y le otorgue legalidad. Pero, ¿qué ventajas te supone como inquilino?

  • Seguridad. Tendrás la seguridad de que el propietario que te alquila la vivienda es el verdadero dueño del inmueble. Así se evitan fraudes y engaños. Además,tienes la garantía de que si la vivienda se vende a otra persona, se mantendrán tus derechos como inquilino.
  • Derecho de adquisición.  En el supuesto de que la propiedad del inmueble cambie de manos, tanto el propietario como el inquilino pueden incluir una cláusula en el contrato de alquiler depositado en el Registro de la Propiedad para obtener un derecho preferente de adquisición sobre el piso.
  • Requerimiento. Si eres propietario de un piso y registras el contrato de alquiler podrás requerir a tu inquilino a través de un juez o un notario, en el caso de que te deba dinero del arrendamiento.

Pese a que el objetivo de este post es presentar las ventajas que supone inscribir el contrato de alquiler en el Registro de la Propiedad, inscribirlo supone alguna desventaja derivada de los trámites burocráticos o del coste variable de la gestión. Sin embargo puede considerarse  que la seguridad jurídica que otorga compensa esta desventaja.

Pasos para inscribir el alquiler en el Registro de la Propiedad

  1. El contrato privado de alquiler lo tienes que certificar ante notario para que tenga una validez jurídica. Cuando pasa por el notario, ya es un documento público.
  2. El contrato de alquiler debe incluir la descripción del inmueble o finca y delimitar su superficie y dimensiones en relación a las viviendas contiguas.
  3. Identificar a las partes que forman parte del contrato. El propietario y el inquilino han de acordar el precio mensual del alquiler, la duración del contrato y las cláusulas que quieran incluir.
  4. Abonar el impuesto de transmisiones patrimoniales en Hacienda (modelo 600) y finalmente inscribir el inmueble en el Registro de la Propiedad.

Éstas son algunas de las ventajas que supone inscribir el contrato de alquiler en el Registro de la Propiedad. ¿Vives de alquiler? Cuéntanos tu caso y si tu vivienda está inscrita en el Registro de la Propiedad.

Fuente: Api.cat

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