Cuando abrimos un nuevo negocio o servicio de cara al público lo hacemos con ilusión, siempre pensando que con nuestro trabajo podemos obtener beneficios, y de esta forma obtener independencia económica y en definitiva calidad de vida.
Hechos tan cotidianos como dormir, se pueden convertir en una pesadilla si nuestro negocio no va bien encaminado, por ello deseamos compartir una serie de consejos para que su negocio sea sostenible y productivo.
En primer lugar debemos tener claro que tipo de modelo de negocio queremos implementar. Es recomendable modelos con alta rentabilidad y en los cuales se pueda obtener altos márgenes de beneficio; en la inmobiliaria por ejemplo, el nivel de producción depende de uno mismo, y ganar dinero depende del tiempo destinado por lo que a mayor disposición e ímpetu, mayores beneficios.
Otro factor muy influyente es la fuente de nuestros ingresos, la cual ha de ser diversa, no centrándose en un único producto o servicio. Por otro lado al igual que diferentes productos, hemos de tener abundantes canales de distribución (presencial, internet, comerciales, oficina a pie de calle, colaboradores, telefónico, …). La solución completa de Adaix te permite ofrecer seguros de todo tipo, servicios inmobiliarios, alquiler, venta, traspaso, ademas servicios de administración de comunidades y financieros.
Establece una base sólida, con ello debemos sentarnos a reflexionar preguntas tan esenciales y que cada empresario debería hacerse:
– ¿Cual es mi objetivo?
– ¿Que hace a mi empresa o servicio diferente?
– ¿Cual es mi mercado y cliente tipo?
– ¿Como esta posicionada mi empresa, localmente?¿y en la red?
En este sentido estamos mencionando algunos de los fundamentos del marketing los cuales son atemporales y imprescindibles. Si no analizamos rigurosamente estas preguntas planteadas, podemos caer en una estrategia de comunicación y servicio equivocado. Debemos ser originales y estar un paso delante de nuestra competencia directa, en Adaix trabajamos para actualizarnos día a día.
Por otro lado siempre debemos de establecer objetivos ambiciosos e intentar conseguirlos, ya que en su búsqueda allanamos el camino y siempre es más fácil trabajar con una motivación.
Si no tenemos ninguna meta que cumplir, ni ambición por crecer, finalmente lo más lógico es que nuestra empresa cierre, debemos de ser muy serios, buscar la excelencia y efectividad, ya que jugamos con todo nuestro empeño e ilusión, además de tiempo y capital invertidos.
Sin duda para que todo lo anterior funcione nuestra técnica de venta ha de estar depurada y por su puesto ayudará nuestra experiencia y profesionalidad, no podemos confiar y decir que nuestro producto o servicio es el mejor, si no que también debemos demostrar por que lo es.
Por último hemos de ser efectivos, la claridad solo viene con la ejecución, el mejor momento de hacer algo es ahora mismo, nunca estarás en mejor momento y no dejes escapar las oportunidades, es prudente reflexionar tranquilamente, pero pasado este tiempo actúa y ponte en marcha. La diferencia del éxito o no, pasa por ser eficiente y rápido en dar tus soluciones y ejecutar tus trabajos.
Podrán decirte yo lo hubiera hecho mejor, pero si eres el primero tu serás el que lo haya realizado y cobrado por tanto, hemos de ser perseverantes y constantes y atender a nuestros clientes es la prioridad.