En 2014 se produjo un cambio de tendencia en la financiación a la hora de abrir una nueva franquicia. Mientras que en 2013 el 40% de los emprendedores que se decantaron por esta vía no precisaron de ayuda externa a la hora de poner en marcha su negocio, el año pasado esta cifra se incrementó considerablemente. El 57,7% de los nuevos franquiciados puso íntegramente el dinero necesario de su bolsillo. Todo esto se extrae del segundo estudio de satisfacción del franquiciado, que elabora la consultora experta en la apertura de franquicias Barbadillo y Asociados.
Este dato se puede relacionar en cierta medida con la mejora de la economía en España, ya que fue en aumento el número de personas o emprendedores que han decidido invertir sus ahorros en una franquicia, pagando entre otras cosas de su bolsillo los costes de apertura.
Hay que decir que cuando una enseña exige unas inversiones altas, la mayoría de los nuevos empresarios opta por recurrir a un crédito. En el caso de que las inversiones sean menores, la tendencia es a cubrir la totalidad de lo exigido con recursos propios o solicitar un préstamo para financiar el 100%. Conscientes de esto, en Adaix hemos ajustado el canon de entrada de nuestra franquicia para que no sea necesario, en la mayoría de los casos, recurrir a un crédito, evitando así los costes adicionales de intereses.
El año pasado, algo más de la mitad de los franquiciados consultados (55%) necesitaron financiación para cubrir entre el 76 y el 100% de la inversión. De estos, el 20% precisaron el 100% de toda la inversión. Hay que decir que la mayoría de estos fueron emprendedores que arrancaron con negocios de menos de 30.000 euros. Un 25% necesitó financiación externa para hacer frente a una cantidad que rondaba entre el 51 y el 75% del total de la inversión, mientras que el 20% restante precisó entre el 20 y el 50%.
Otro dato a tener en cuenta de esta encuesta es que cuatro de cada cinco consultados sostienen que la inversión realizada fue superior a lo que en un principio les había comunicado el franquiciador. El 43% del dinero exigido se destinó a la obra civil, el 10% a la maquinaria, el 33% al mobiliario y el 14% a otras partidas.
Fuente: Cinco Días
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