Parece que la palabra exportación nos devuelve el alivio en cada telediario. Los españoles estamos a expensas de conocer cada día cuál ha sido el incremento de ventas en el extranjero de las empresas nacionales. Sin embargo apenas se hace hincapié en otra cuestión similar y de estrecha relación: La exportación de servicios.

Cada vez es mayor el volumen de servicios que trasladamos fuera de nuestras fronteras, no solo vendemos productos, sino que hemos aprendido a reproducir en el extranjero los métodos de trabajo que mejor nos han funcionado. Dentro de este rango encontramos que la comercialización inmobiliaria española ha sido un ejemplo a seguir.

Esta operativa inmobiliaria se caracteriza por redes de franquicias que permiten a las empresas expandirse por todo el territorio nacional y una gran diversificación que permite la oferta de servicios complementarios (seguros, administración de fincas, etc.) adaptados a las circunstancias de cada momento.

Alain Brand, director del Grupo Adaix, fiel a una operativa inmobiliaria basada en los pilares que se mencionaban con anterioridad afirma “ En resumen, lo que queremos ofrecer es un servicio integral al cliente que realiza una de las adquisiciones más importantes de su vida”.

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