Dar el paso de comprarse una casa no es una decisión que se debe tomar a la ligera. además, debido a su coste debemos sopesar todos los factores que podrían beneficiarnos. Pero, ¿existe un momento perfecto del año para comprar una casa? Sobre el papel no existe, pero hay detalles que nos pueden beneficiar a la hora de lanzarse a la compra: las cuentas ahorro y el posible interés por reinvertir una plusvalía de otra venta

Además, este año en particular, la inminente eliminación el 1 de enero de 2015 de los coeficientes de corrección de la inflación y de abatimiento (contemplada en la reforma fiscal) puede adelantar las operaciones de venta y provocar un rally inmobiliario, entre los que tengan prisa por vender y los que aprovechen la circunstancia para apretar los precios. Algo que hará del último trimestre un momento idóneo para comprar una vivienda usada.

Buying-a-House

“No existe ningún momento que sea mejor que otro. no es como los coches, que los concesionarios tienen que lograr una serie de objetivos de ventas marcados a lo largo de cada año y al final de cada ejercicio pueden hacer rebajas para lograr mejorar las ventas”, detalla el experto en hipotecas, Juan Villén

Ni en enero, ni en diciembre

El final en diciembre de 2012 del incentivo fiscal de la deducción por la compra de una vivienda ha hecho que ya nadie esté esperando a final de año. da igual comprarla en enero o en diciembre

“En vivienda no se produce un fenómeno de estacionalidad. La vivienda está más ligada a la demanda que a la oferta, algo que hace que el que quiere vender intente hacerlo lo antes posible o al precio que tiene en mente. El que compra depende de los vendedores”, añade Villén.

Precisamente por este motivo, se ve cómo en los meses de vacaciones –sobre todo agosto- se compran menos viviendas al ser más complicado contactar con vendedores (personas o inmobiliarias). De hecho, en octubre y noviembre del año pasado, que es cuando generalmente se registraron las viviendas compradas en agosto en el registro de la propiedad, la venta de viviendas tocó mínimos históricos, según los datos del INE.

Pero hay dos colectivos a los que sí les afecta la estacionalidad de la vivienda:

  1. Los que tienen una cuenta ahorro-vivienda: a este grupo el tiempo sí le importa. De hecho hay casos en los que se produce un exceso de prisas cuando están a punto de vencer los plazos. Se recomienda ver si conviene más devolver la ayuda o comprar una vivienda a toda prisa.
  2. Los que han vendido su vivienda habitual:se trata de un caso especial. “los que hayan vendido su vivienda habitual y quieran reinvertir la plusvalía del beneficio de la venta (en el caso de que la tuviera), deben comprar en un plazo máximo de 2 años entre una transacción y la otra”. así te ahorras computar esa plusvalía en el IRPF.

Al margen de estos dos casos, comprar antes de finales de este año puede ser un buen momento. Los especialistas en tributación prevén un incremento de las ventas de viviendas usadas como consecuencia de la rebaja de los beneficios fiscales que el gobierno ha incluido en la reforma fiscal. Una medida que afecta a todos los vendedores pero especialmente a los inmuebles adquiridos antes del 31 de diciembre de 1994, puesto que desaparecen los coeficientes de corrección de la inflación y los de abatimiento, que permitían reducir una parte de la ganancia patrimonial generada hasta el 20 de enero de 2006

Otros factores pueden condicionar la compra de una vivienda como son una fecha límite de una promoción o la búsqueda de financiación, que se recomienda sea siempre un proceso que se inicie al menos entre 2 y 3 meses de la fecha en la que pensemos comprar la vivienda, así no tendremos prisas y podremos comparar más precios.

Fuente: Idealista.com