Las humedades son un problema. Pueden llevar a discusión entre vecinos que vivan en comunidad o entre los inquilinos y los propietarios. La aparición de las mismas produce verdaderos problemas y en la mayoría de los casos siempre tienen una difícil solución.

En el caso de una vivienda alquilada hay múltiples preguntas y situaciones a las que hay que hacer frente. ¿qué pasa si el inquilino no avisa al dueño de la vivienda de la aparición de humedades en su casa? ¿está obligado a hacerlo? ¿qué responsabilidad tiene el propietario en este caso?

Lo adecuado es que si aparece una humedad en la vivienda que alquilamos avisemos al propietario de la misma para que solucione el problema, ya sea mediante su propio seguro o el seguro de la vivienda o comunidad que haya provocado esta situación.

El dueño del inmueble es el responsable de mantener el buen estado de la vivienda y de reclamar a quien haya ocasionado el problema. Sin embargo, es obvio que siempre hay que actuar de forma lógica y tratar de solucionar el problema para que no llegue a mayores.

Otro de los casos más comunes en cuanto a las humedades es cuando la comunidad está involucrada en el problema y debe hacerse cargo del arreglo. La comunidad, en determinados casos y situaciones, está obligada a afrontar estos gastos. uno de estos casos puede ser cuando el problema tiene que ver con obras de conservación y mantenimiento del edifico. Esto le corresponde arreglarlo a la comunidad tal y como establece el artículo 10.1 de la ley de propiedad horizontal.

En definitiva, las humedades son un problema menor, pero que causa muchas molestias y disputas entre quienes las sufren y las causan, de ahí que lo importante sea actuar con responsabilidad y tratar de llegar a un entendimiento satisfactorio para todas las partes.

Fuente: alquilerprotegido.es