Aquellas personas que estén, como el capitán Nemo, cansadas de la vida terrestre, pueden plantearse la posibilidad de tener una vivienda acuática.
En realidad, es un verdadero lujo acceder en propiedad a una casa así, amplia y cómoda. De ambientes concebidos como los de crucero de lujo, pero con grandes ventanales de piso a techo para mirar el maravilloso fondo del mar caribeño.
Se pueden observar los corales, algas, peces y las abundantes muestras de la vida marina que predomina en sus aguas transparentes muy luminosas. Esta sofisticada residencia submarina es un verdadero observatorio para los privilegiados.
Habitar una casa como la de las imágenes aquí presentadas es una curiosa experiencia, inversa a la de contemplar un acuario, porque es la vida marina la que se encuentra ante una extraña estructura con otros seres vivos (humanos) en su interior.
En la residencia submarina los ambientes se distribuyen en forma anular y las paredes al mar son de vidrio. Su diseño es el de una casa redonde y la apariencia de la forma la de un platillo volador o nave espacial.
La intimidad queda expuesta a la naturaleza y el «diálogo entre el interior y el exterior» al que tantas veces se alude en arquitectura es pujado a una mayor intensidad.
El lujo de estos proyectos de casas sumergidas está dado por el precio y la exclusividad, e implica desafíos serios de ingeniería.
Su valor aproximado es de 10 millones de dólares pero el precio final depende de muchos factores que pueden quedar implicados al concretar el proyecto, como los de seguridad y sustentabilidad en un ambiente de condiciones variables.
Una estructura central con estalera helicoidal y la baja profundidad permiten acceder a la casa submarina. En la superficie hay estructuras flotantes para permitir el amarre de lanchas y cruceros, e incluso una plataforma helipuerto.
En Belice, ya se está construyendo un resort bajo el mar, ideal para parejas, y ya tiene una lista de espera larga.
Hay proyectos y conceptos de casas bajo el mar anteriores e incluso algunos habitáculos submarinos desde hace años, pero este tipo de casas realmente son las primeras viviendas bajo el agua que podemos adquirir con las comodidades de una casa suntuosa, si cuentas con dinero eso sí.
El interior de esta sofisticada vivienda se mantiene a niveles de presión iguales a los de superficie. La casa está soportada sobre delgados pilotes insertados en el fondo marino y el impacto sobre el suelo es mínimo.
Se espera un avance en la población humana de los mares por medio de construcciones sobre la superficie de las aguas y submarinas: casas barco, casas flotantes, residencias sobre pilotes sobre el nivel del mar, y casas bajo el agua.