Las exigencias de la nueva normativa sobre certificación de eficiencia energética, no solo suponen una cuestión positiva de cara a la conservación del medio ambiente y el ahorro en agua y electricidad en viviendas de obra nueva, sino que está obligando a muchos edificios a llevar a cabo una reforma integral de sus instalaciones, para conseguir adaptarse a las nuevas directrices.
Asimismo desde Adaix nuestros expertos aseguran que estas reformas integrales no suponen un gasto innecesario, ya que se traducirán en ventajas que a largo plazo no solo evitarían sanciones en materia de certificación energética sino que contribuirán a nuestro ahorro, de modo que podríamos llegar a reducir hasta en un 70% el consumo de electricidad y calefacción en nuestra vivienda.
Anthony Flores, experto en certificación energética del Grupo Adaix, asegura que las condiciones de las viviendas actuales «son muy ineficientes» y absorben la tercera parte del consumo energético en el país .
Por otro lado, la rehabilitación integral (arquitectónica y energética) también afecta de forma directa a uno de los asuntos que más afectan a la economía nacional, el desempleo. Se podría calcular por ejemplo una reforma completa de 450.000 viviendas anuales generaría unos 150.000 empleos en España.