La falta de precaución en muchas ocasiones podría costarte una fortuna o incluso todo tu patrimonio, las notarías día a día conocen nuevos casos de individuos que por confiar en exceso de quienes creían buenas personas o bien por no preparar a tiempo documentos necesarios llegan incluso a arruinarse. Desde AdaixGroup, ofrecemos algunos consejos que tras consultar a un notario podrían sernos de utilidad para evitarnos desagradables sorpresas:
- En el caso de estar casado/a haz testamento lo antes posible, sobre todo si tu pareja es propietaria de algo que no entraba en los bienes gananciales. Por ejemplo si tu cónyuge es dueño de la empresa donde trabajas, o de la vivienda en que vives en caso de fallecimiento si no hay testamento pasarán directamente a los hijos, de modo que en caso de problemas podrían echarte y no contarías con ningún tipo de derechos respecto a estos bienes. Asimismo se recomienda que la pareja te ponga como «usufructuario», así te aseguras el disfrute de esa propiedad hasta el final de tus días.
- Es preferible comprar un piso a tus hijas que hijos. Según la práctica habitual, en caso de divorcio con niños de por medio suele dictaminarse que tanto la custodia de los hijos como la casa que habiten se los quede ella. Y si no eres muy afín a tu nuera, tienes un serio problema.
- Si firmas un poder establece un límite de tiempo. Muchas veces firmamos poderes a parejas, familiares, amigos… para permitir que lleven a cabo alguna gestión en nuestro nombre. Este poder es conocido como el de ‘ruina’ por los propios notarios ya que daría la posibilidad a quien lo adquiere incluso de vaciar nuestras cuentas y liquidar todo nuestro patrimonio. Para evitar problemas derivados de un exceso de confianza es mejor poner el tiempo de vigor, a fin de llevar a cabo una revisión periódica del mismo.
- Nada de bodas Express con extranjeros: muchos españóles han sido víctimas de este timo, conocen a una persona a través de la red, comienzan una relación virtual y se casan por poderes o tras conocerse. Al final descubren que la única intención de su «amor» era arruinarle, conseguir la nacionalidad, traer a parientes… y sucede lo que explicábamos en el segundo consejo.
- NUNCA firmes algo que no entiendas, es preferible acudir a una persona de confianza que lo entienda y te lo explique debidamente y de forma más sencilla. En caso de dudas es preferible no firmarlo, sobre todo en aquellos acuerdos que involucren dinero de pisos, inversiones o productos financieros.